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An. 2. Congr. Bras. Hispanistas Oct. 2002

 

La voz de la canción en el franquismo

 

 

Elda Firmo Braga

Universidade Federal Fluminense

 

 

Entre julio de 1936 y abril de 1939, España sufrió una sangrienta guerra civil. De un lado estaban los republicanos, de otro un sector del ejército español. Con el triunfo de los militares sublevados liderados por el general Francisco Franco, se inicia en España un nuevo ciclo histórico. Franco pasa a dirigir y a construir otro Estado español y con la disculpa de combatir las ideas del comunismo que empezaba a propagarse por Europa tras la Revolución Rusa se aproxima al fascismo. Su gobierno estaba basado en un régimen totalitario que resultó en una dictadura extremamente represiva.

El presente estudio versa sobre los últimos años de la posguerra en España (final de la década de 60 e inicio de la de 70), donde algunos sectores de la sociedad española empezaban a rebelarse con más fuerza en contra la opresión impuesta a la gente por la dictadura franquista. Utilizamos, como fuente de reflexión, tres músicas que retratan la época de la debilitación del régimen franquista donde algunas voces empezaban: a evidenciar el falso moralismo de la sociedad; a denunciar la represión política ante los que luchaban en contra a las injusticias; y a propagar la esperanza de una España más democrática.

Las composiciones seleccionadas forman parte de un conjunto de canciones presentes en el Cancionero General del Franquismo, de Manuel Vázquez Montalbán. Según el autor, su libro trata de ''inventariar canciones que habían alimentado el gusto popular durante la larga posguerra española'' y de ''ser el exponente de la relación entre una cultura popular dirigida especialmente a través de la programación radiofónica y el uso que hizo de ella el pueblo''. (VÁZQUEZ MONTALBÁN, 2000, p.6)

Hay muchas canciones de protesta contra la dictadura franquista. Entre ellas figuran las que fueron cantadas por el catalán Lluis Llach, el valenciano Raimon, también de Paco Ibáñez, además de muchas otras interpretadas por Joan Manuel Serrat. Ellos cantaron músicas con letras de la poesía de Antonio Machado que fue un símbolo de resistencia a la dictadura franquista, además de letras de los poetas del grupo de la poesía social, como Celaya. Por otra parte, también hay una serie de canciones, entre las muchas que estuvieron de moda, que planteaba críticas a los problemas de la época, tales como: falta de libertad y opresión a la mujer y no consideradas exactamente como músicas de protesta. Dichas letras eran populares y no estaban censuradas por las consignas, son éstas las que elegimos para este estudio.

Es nuestra intención hacer una lectura de estas canciones como respuesta al momento histórico en las cuales estaban inseridas. Para esa finalidad, utilizamos como soporte teórico textos literarios, históricos, periodísticos y algunos ensayos sobre esta época, como el libro Usos amorosos de la postguerra española, de Carmen Martín Gaite.

La canción Poco antes que den las diez1, de Joan Manuel Serrat, es una muestra de denuncia del falso moralismo de la sociedad española respecto a la mujer, una de las grandes víctimas de la represión de la posguerra en España.

La mujer sufrió variados tipos de opresión y perdió varios derechos civiles, entre ellos: no podía frecuentar lugares públicos con otro hombre que no fuera su hermano, padre o marido, y cuando salía con su novio tenía que llevar otra mujer mayor como acompañante; no podía tener amistades con hombres bajo ninguna circunstancia –relacionarse con personas de otro sexo era algo escandaloso –; no podía trabajar en lo que le apeteciera, a esa mujer solamente estaba permitido ejercer muy pocas funciones, tales como: enfermera, monja, profesora, esposa y madre.

El papel de la mujer en la sociedad estaba bien determinado. Desde muy joven ella era instruida por la Sección Femenina de la Falange para transformarse en base de sustentación del idealismo franquista, puesto que, además de sometida a las reglas impuestas también la preparaban para proteger los valores españoles, responsabilizándose por la vigilancia y control de su familia bajo a la doctrina católico-franquista.

El deseo de la sociedad totalitaria de España de la época era crear para el mundo una mujer que fuera el paradigma de virtud y perfección, al mismo tiempo que un pilar de sustentación del régimen franquista. Carmen, la protagonista de la novela española Cinco horas con Mario, de Miguel Delibes, es un ejemplo de esa mujer perfecta, defensora de la moral y de las tradiciones españolas que condenaba todo lo que huía a los patrones impuestos por la sociedad de aquel momento.

La represión social era profundamente fuerte, la mujer tenía que preservarse, puesto que, ponerse en evidencia era una manera de pecar.

En este contexto de opresión surge la canción Poco antes que den las diez, cuyos versos denuncian al falso moralismo de la sociedad española de la posguerra a través de la sátira e ironía incorporadas en la figura de una joven que, hasta cierto punto, huye a los patrones y valores impuestos por la sociedad de su época: porque lleva una vida doble. Por un lado, es la perfecta chica obediente, educada, de buena familia. Por otro, una mujer que tiene un amante oculto.

Poco antes que dé la hora límite de volver a su casa, la protagonista de la canción se levanta de la cama de su amante, alisa el pelo que él con sus dedos deshiló y abrocha su falda con el intento de borrar las huellas que podrían denunciar su secreto, volviendo a transformarse en una dama como una invertida Cenicienta. Después se despide de su amante con un ''Hasta mañana'', señalando de esta manera que sus encuentros clandestinos eran cotidianos.

Al llegar a su casa antes de las 10:00 de la noche, su familia la recibe con orgullo como si fuera una chica fiel a los preceptos de la honradez establecidos como paradigma de decencia para todas las mujeres de aquella época.

Tu madre abrirá la puerta,
sonreirá y os besaréis.
La niña duerme en casa...
y en un reloj darán las diez.

Otro ejemplo de canción como respuesta a la opresión de la sociedad franquista es Acto de fuerza número 102, de A. Salermo y M. Salermo. De las músicas seleccionadas, es la menos conocida de la gente de la época. Dicha composición ostenta una audaz denuncia, presentándose como portavoz de las víctimas de las atrocidades cometidas por la represión de la dictadura franquista.

La canción narra las consecuencias de una acción represiva en una calle. El espacio expuesto en la letra de la composición Acto de fuerza número 10 se asemeja a un escenario de película de terror. Esta calle podría equivalerse a un cementerio, pues se ha transformado en tumba con

chico y chicas
sentados por tierra

Allí, no hay vida, hasta el aire huele a un silencio de muerte; nadie respira, nadie habla tampoco, pues han alcanzado callar las voces que denunciaban las atrocidades cometidas por la represión.

La moto es la única que alcanza escapar a la violenta acción, simbolizando aquí la rebeldía juvenil de los años 60, momento en que los estudiantes empezaban a organizarse y a demostrar sus quejas.

De pronto a lo lejos
escapa una moto

Los únicos ruidos que se oye en esta calle son los de los motores y la sirena de una ambulancia.

El motor está representando la fuerza de los proletarios y su lucha ante las opresiones.

con los motores sólo
se busca coraje
motores que rugen
en dura lucha

Y, personificando el grito reprimido de toda una sociedad ante tan cruel violencia, se presenta

la dura sirena
de una ambulancia

En la literatura española, encontramos también ambientes sombríos y silenciosos semejantes al descrito en Acto de fuerza número 10. La novela Nada, de Carmen Laforet, presenta en primer plano el vacío y la penumbra de las calles de Barcelona juntamente con el silencio urbano y la destrucción de la ciudad. El escenario es opresor y a la vez deprimente, influye en la vida de los personajes que se presentan como personas perdidas, sin perspectivas en los momentos de la posguerra.

Tiempo de Silencio, de Luis Martín-Santos, que tiene como espacio la ciudad de Madrid, del mismo modo desde su título denuncia la falta de voz de la gente y del diálogo. Hay en esta novela la predominancia del silencio impuesto.

Igualmente, la letra de la canción Acto de fuerza número 10 narra la consecuencia de un episodio más del silencio de la represión. El silenciamiento era utilizado como una herramienta ante los que se oponían al régimen franquista y osaban luchar por la libertad.

La tercera canción que utilizamos para el presente estudio es Los chicos con las chicas3, de Down Down y Manolo Díaz. Dicha composición reivindica una sociedad menos opresora, un lugar donde las personas puedan ser libres y felices.

La juventud que vivió bajo la dictadura sufrió muchas represiones. Uno de los objetivos de Franco era el de adiestrar al joven dentro de los principios morales de la iglesia y de las directrices ideológicas del régimen que impuso a la sociedad española.

Había en la posguerra un contraste con la época anterior. Los cambios en la sociedad franquista ocasionaron alteraciones en los comportamientos humanos. Antes del régimen totalitario que empezó a imperar a partir de 1939, los niños y los jóvenes tenían más libertad. Josefina R. Aldecoa nos da su testimonio sobre ese momento al comentar el panorama histórico anterior a la Guerra Civil española:

''Nuestros padres olvidaron las normas, nos dejaron vivir. Se podía salir de casa sin grandes dificultades sin que nadie se fijara en nuestra presencia Se podía ir sucio. Se habían roto las rutinas internas de la vida familiar. ...Se habían abiertos las puertas de la calle anárquica y variopinta.''

Más adelante, Josefina R. Aldecoa contrasta claramente la realidad anterior con lo que ocurrió después:

''Como una reacción, quizá desesperada, quizá necesaria para sobrevivir, los padres se volvieron más exigentes... La censura de todo lo que hacíamos iba a estar presente en nuestra adolescencia, en contraste con la forzosa libertad de los años de la guerra. ...En aquellos primeros cuarenta, los chicos con los chicos tenían que estar; las chicas, a su vez, con las chicas.''4

Los jóvenes no podían disfrutar de la vida, los placeres estaban prohibidos. Franco decía: ''No hemos venido a regalarnos con la vida ni a disfrutar de esa paz que muchos burgueses aman''5. Las personas tenían que dejar de lado el deseo de ser feliz, pues la felicidad era algo inconsistente.

Desde el título de la canción Los chicos con las chicas, hay una reivindicación de cambios. Durante la dictadura de Franco, los chicos y las chicas estaban separados los unos de los otros desde muy temprano; el alejamiento empezaba en las escuelas y seguía en las iglesias, los niños se sentaban de un lado y las de niñas de otro.

Esta canción reclama una sociedad libre del sexismo en que:

la chica con los chicos han de vivir,
y estando todos juntos deben cantar

Y también desea un lugar donde los viejos puedan volver a ser niños:

los viejos bailarán, me imitarán a mí

Los jóvenes desean vivir en una sociedad sin falso moralismo donde puedan asumir sus acciones:

no nos impedirán que al anochecer
podamos pasear, bailar y hasta correr,
la gente no nos mirará, no hay nada que esconder

Por lo tanto, esta canción se presenta como una invitación a una nueva España, un país más democrático en el cual las personas puedan gozar de la libertad y volver a disfrutar la vida y la felicidad.

Las tres canciones citadas anteriormente nos han permitido tener una visión de una parte de la historia de la posguerra española: al cuestionar el falso moralismo que había en la sociedad; al denunciar las consecuencias sufridas por los opositores al régimen de Franco en los enfrentamientos en la calle; al difundir un mensaje de optimismo a través de la esperanza de una España más flexible, donde todos puedan ser respetados por todos y las personas alcancen a vivir en paz.

Así, hemos podido conocer la música española también como un instrumento contra la opresión del régimen franquista. Del mismo modo que tuvo en aquel momento el papel de ser un elemento más de propagación de expectativas acerca del fin de la represión y, por consiguiente, de la recuperación de la libertad.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

DELIBES, Miguel. Cinco horas con Mario. 27ª ed., Barcelona: Destino, 2001. 256 p.

HARO TECGLEN, Eduardo. Así éramos en los 40. El País (Semanal Suplemento: La España del desembargo) Madrid, Junio/1994.

LAFORET, Carmen. Nada. Barcelona: Destinos, 1997. 268 p.

MARTÍN GAITE, Carmen. Usos amorosos de la postguerra española. 5ª ed., Barcelona, Anagrama,1987. 221 p.

MARTÍN-SANTOS, Luis. Tiempo de Silencio. 33ª ed., Barcelona: Seix Barral, 1990. 295 p.

NASCIMENTO, Magnólia Brasil Barbosa do. O diálogo impossível – A ficção de Miguel Delibes e a sociedade espanhola no franquismo. Niterói: EdUFF, 2001. 203 p.

VÁZQUEZ MONTALBÁN, Manuel. Cancionero General del Franquismo (1939-1975). 2ª ed., Barcelona: Crítica, 2000.

 

 

1 In: VÁZQUEZ MONTALBÁN, 2000, p. 445.
2 In: VÁZQUEZ MONTALBÁN, 2000, p. 307.
3 In: VÁZQUEZ MONTALBÁN, 2000, p.309.
4 In: MARTÍN GAITE, - p. 91/1987.
5 Idem - p. 23-1987.